
El proyecto busca incrementar la influencia social y política de las entidades y grupos feministas de Barcelona. Para conseguirlo, es imprescindible tejer alianzas con periodistas y medios de comunicación y promover la incorporación de la perspectiva de género en todos los aspectos de la comunicación social.
Crear un clima de confianza entre periodistas y feministas es fundamental para la transformación social. Y es un planteamiento innovador que hasta ahora no ha sido explorado; pensamos que los resultados de esta comunión pueden ser realmente positivos.
En este proceso, fortalecer la red feminista –tanto la colaboración entre grupos y entidades como los conocimientos y capacidades comunicativas de cada feminista– es imprescindible. Por eso, hemos planteado un proceso estructurado en tres fases:
- Diagnosis de la situación de partida: elaboración y presentación de un informe de evaluación global.
- Formación de los colectivos para la mejora de las relaciones con los medios de comunicación, según las necesidades detectadas.
- Trabajo colaborativo y en red para llevar a cabo una labor de incidencia y sensibilización con los medios de comunicación y las instituciones.
En otoño de 2018 finalizó la segunda fase del proyecto, centrada en la formación de entidades de mujeres y grupos feministas. A partir de las auditorías particulares de cada entidad, hemos elaborado una propuesta de capacitación estructurada en cápsulas formativas, centradas mayoritariamente en el ámbito comunicativo (dinámicas organizativas de los medios, redacción de contenidos en formato periodístico, uso de las redes sociales, herramientas audiovisuales básicas o herramientas comunicativas orales, entre otros). También se ha ofrecido un taller sobre fuentes de financiación. En total, hemos organizado 10 sesiones formativas en grupo, donde han participado una treintena de entidades.
A partir del mes de septiembre, hemos ofrecido la posibilidad de solicitar asesoramiento individualizado con las mismas formadoras y sobre las temáticas ya tratadas en los cursos, para profundizar en aquellas consideradas más útiles para cada entidad. De este modo, cada organización ha podido confeccionar el itinerario formativo que ha considerado más conveniente.
Después de esta fase de capacitación, actualmente el proyecto se centra en reforzar la colaboración entre entidades y medios de comunicación, con el objetivo de promover una comunicación y un discurso feminista en la esfera pública.